Elena Valenciano: “Los Derechos Humanos deben ser el estandarte de la política exterior europea”

Elena Valenciano: “Los Derechos Humanos deben ser el estandarte de la política exterior europea”

Elena ValencianoElena Valenciano, eurodiputada por el PSOE (Partido Socialista)

Por Alícia Oliver

Su compromiso por el avance de los derechos de las mujeres viene de lejos. Militante de las Juventudes Socialistas fundó la Asociación de Mujeres Jóvenes; fue coordinadora española del Lobby Europeo de Mujeres; directora de la Fundación Mujeres ; vicepresidenta de la Asociación de Mujeres de la Europa Meridional (AFEM). En 1999 llegó al Parlamento Europeo y cómo no, formó parte, entre otras, de la Comisión de Derechos de la Mujer e Igualdad de Género. Desde su segunda legislatura (2004) trabaja por los Derechos Humanos y en Asuntos Exteriores.

Apunto de abandonar su tarea como europarlamentaria para regresar a la política nacional (es la número 9 de la lista por Madrid al Congreso de los Diputados/as) Valenciano nos concede la siguiente entrevista.

Elena ValencianoTeniendo en cuenta que la abolición de la pena capital es uno de los requisitos fundamentales para formar parte de la Unión Europea , ¿cómo se puede entender que a la hora de querer instaurar un día europeo contra la pena de muerte uno de los 27 países miembros de la Unión se negara a hacerlo?

No era la posición de un país, sino la de un jefe de Gobierno, que más tarde perdió las elecciones, lo que impidió que se instaurara el 10 de octubre el Día Europeo contra la pena de muerte. Cuando el gobierno polaco cambió de signo, los ministros de Justicia de la UE aprobaron por unanimidad la instauración de ese día. Cabe esperar que todos los Estados miembros sigamos remando en la misma dirección para que la Unión Europea se convierta en el punto de referencia y garante de los derechos humanos.

La defensa de los Derechos Humanos forma parte de los valores europeos y así lo ha puesto de manifiesto su ciudadanía con sus continuas condenas tajantes a la pena de muerte.

La Unión Europea se sustenta en pilares tan sólidos e irrenunciables como el derecho a la vida, a la dignidad de las personas y el respeto a los derechos humanos. Ésa es la decisión de la inmensa mayoría de la ciudadanía europea, y la política debe responder a ese sentimiento.

¿De qué manera puede actuar la UE en materia de derechos humanos contra aquellos países miembros que, en algún momento, puedan actuar en contra de los principios fundamentales de la UE ?

En los países de la Unión gozamos de un Estado de Derecho que garantiza la protección de su ciudadanía.

Destacaría especialmente el trabajo del Parlamento Europeo, única institución europea cuyos diputados y diputadas son elegidos por sufragio universal directo, y que desde su creación ha trabajado de forma constante y decidida a favor de los Derechos Humanos, tanto dentro como fuera de la UE. También habría que destacar el Tribuna Europeo de Derechos Humanos.

Además, el carácter vinculante que se otorga a la Carta de Derechos Fundamentales en el nuevo Tratado de la UE -que entrará en vigor en 2009- es de gran importancia, porque supone la soberanía absoluta de los derechos de las ciudadanas y ciudadanos de la UE bajo las máximas de dignidad, libertad, solidaridad, igualdad, ciudadanía y justicia. Hemos logrado lo que hace 100 años parecía imposible.

¿A su parecer, y ante el gran debate que tenemos sobre la seguridad, gozan de buena salud los derechos humanos en la UE ?

En general, podemos asegurar que gozan de buena salud. Esto no implica que no debamos estar vigilantes. Basta recordar el caso de los vuelos de la CIA , que puso de manifiesto que algunos gobiernos no actuaron con el necesario respeto al derecho internacional y a la obligación de defender a su ciudadanía.

También hay otros asuntos que nos preocupan y en los que tenemos que avanzar, como es la efectiva igualdad entre mujeres y hombres, la no discriminación, la situación de las minorías, la integración de los y las inmigrantes, el tráfico de mujeres, niñas y niños… Sin embargo, creo que la Agencia Europea de Derechos Fundamentales, que comenzará a operar este mismo año, será determinante para ejercer una función de vigilancia y evaluación de la protección de los derechos humanos en el seno de la Unión Europea.

“Tenemos que hacer posible la
creación de una directiva europea
contra la violencia de género”

¿Qué lugar ocupa la defensa de los DD.HH. en la política exterior de la UE ? ¿No cree que a veces la sociedad civil pueda pensar que el desarrollo y la defensa de éstos pueden estar condicionados por intereses políticos y económicos?

La protección y la promoción de los derechos humanos es un objetivo global de la política exterior de la UE. No se trata de una aspiración utópica, sino de nuestra obligación jurídica, además de ética, como establece, entre otros, el artículo 11 del Tratado de la UE.

En mi opinión, los Derechos Humanos deben ser el estandarte de la política exterior europea, y la Unión debe valerse de su capacidad de influencia para mejorar las condiciones de vida de las personas de los países con los que mantenemos relaciones.

He reiterado en varias ocasiones que cuando nos sentamos a negociar acuerdos económicos o comerciales con un país en el que se vulneran los derechos fundamentales, no podemos poner sobre la mesa cifras, acuerdos y contratos, mientras, vergonzantemente, escondemos bajo la alfombra la situación que les toca sufrir a sus ciudadanos y ciudadanas. Si dejamos los derechos humanos fuera de la sala de negociaciones, estaremos cayendo en el cinismo más macabro.

Hace unos meses fui autora del Informe sobre el funcionamiento de los diálogos en materia de derechos humanos y de las consultas sobre derechos humanos con terceros países

El objetivo del informe es evitar los resquicios por donde se filtra la ambigüedad que favorece la postergación y arrinconamiento de los derechos humanos, y ése fue el compromiso que el Parlamento Europeo exigió al Consejo y a la Comisión , para aumentar así su eficacia y su transparencia.

En 1990, Aung San Suu Kyi, recibió el Premio Sajarov a la Libertad de Conciencia que otorga, cada año, el PE aunque no pudo venir a recogerlo por estar bajo arresto domiciliario. ¿Se está haciendo algún tipo de gestión desde el PE para recuperar las libertades en Myanmar?

Este premio supone el reconocimiento de Aung San Suu Kyi por su trabajo y defensa de los derechos humanos, y es también una manera de denunciar lo que allí está pasando. El Parlamento Europeo está muy comprometido con la situación en este país; hemos realizado numerosas resoluciones denunciando la violación de derechos humanos y seguimos en ello. De hecho, en breve está previsto otro seminario sobre Myanmar (antigua Birmania)

¿Qué está haciendo la UE y, en concreto el PE, para acabar con la violencia machista que, según diferentes estudios, alcanza a 1 de cada 5 mujeres en nuestro continente?

La UE ha puesto en marcha diferentes iniciativas. Una de las más recientes es la campaña contra la violencia de género que lanzó el pasado año el Consejo de Europa.

Además, la UE cuenta con varios programas e instrumentos para prevenir y combatir toda forma de violencia ejercida contra niños, niñas, adolescentes y mujeres. El más destacado es el Programa Daphne, que está funcionando desde 1997.

“Reconozco que me voy
con nostalgia. 
El Parlamento
Europeo ha sido una excelente
escuela de aprendizaje democrático”

Sin embargo, cada uno de los veintisiete Estados tiene su propia legislación; cada uno define de un modo distinto qué es violencia de género y utiliza sistemas diferentes para contabilizar a las víctimas. Por ello, y dada la gravedad del problema, yo soy partidaria de elaborar una ley integral europea y, en este sentido, los socialistas europeos hemos puesto en marcha varias iniciativas parlamentarias, como es la de designar una partida en los próximos presupuestos para estudiar las legislaciones de los distintos países. Éste sería el primer paso para crear esa ley integral que dotará a todas las mujeres europeas de los mismos derechos e instrumentos para combatir la violencia de género.

Tenemos que hacer posible la creación de una directiva europea contra la violencia de género.

¿Cómo se abordan, desde las instituciones europeas, temas como el feminicidio en Ciudad Juárez y otros países centroamericanos?

Con un enorme compromiso y sensibilidad, denunciando desde la Eurocámara y ejerciendo presión tanto a los gobiernos como a la opinión pública para poner fin a esta terrible realidad que afecta a muchas mujeres, no sólo en Ciudad Juárez, también en otros lugares, como Guatemala, la situación es alarmante.

Pero debo confesarle que a veces es un trabajo muy ingrato. Ha costado mucho tiempo poder realizar un Seminario sobre Ciudad Juárez donde escuchar de primera mano a personas expertas, pero al final se consiguió. Además, el pasado año la Eurocámara aprobó un informe del eurodiputado Raúl Romeva sobre los asesinatos de mujeres en América Central y México y el papel de la UE para erradicarlos ( )

Como novedades del 2007 en cuestiones de género, tenemos la creación del Instituto Europeo de la Mujer ¿qué opinión le merece este Instituto?

Crear un organismo europeo independiente que trabaje en la igualdad de género es un gran paso adelante; aún más si consideramos que el Instituto está abierto a la participación de terceros Estados con los que existen acuerdos sobre la materia.

El Instituto Europeo de la Mujer desarrollará estrategias conjuntas para combatir la desigualdad y concienciar a la ciudadanía. Se trata también de poder disponer de procedimientos e indicadores comparativos sobre la situación de las mujeres en los países de la UE.

En su currículo vemos que también es miembro de la Asamblea Parlamentaria Paritaria ACP/UE . ¿En qué consiste su trabajo?

He sido miembro de esta Asamblea hasta hace unos meses, donde he trabajado codo con codo con parlamentarios y parlamentarias de África, Caribe y Pacífico (ACP), tratando de buscar acuerdos y soluciones sobre todos aquellos asuntos relacionados con los países del área y sus relaciones con la Unión Europea.

Además, fui la ponente del informe que abordaba la educación de las niñas en los países ACP. Destacaría especialmente el consenso de todos y todas en reconocer la educación de las niñas como una estrategia clave para el desarrollo y la consecución de los Objetivos del Milenio.

Mirando al futuro ¿hacia dónde camina la Unión Europea ?, ¿Cuáles son los retos que, en su construcción, señalaría usted, como más importantes?

Nuestro verdadero reto es seguir construyendo una Unión donde se viva en paz, donde haya igualdad, pleno empleo, donde se respete la diversidad… una Unión que se convierta en referente mundial en la defensa de los Derechos Humanos, de los derechos de las personas más desfavorecidas, de la cooperación con países en vías de desarrollo o en la lucha contra el cambio climático…

Para alcanzar estos objetivos, nos estamos dotando de intrumentos que lo hagan posible, como el Tratado de Lisboa, que ha venido a poner fin a la ‘crisis de los 50′ y nos permitirá seguir creciendo y dando respuesta a los grandes retos de la globalización.

La Unión Europea debe ser más eficaz, más transparente y más democrática, lo que le permitirá ser más fuerte en el concierto mundial.

En sus casi 10 años de eurodiputada que destacaría de su experiencia europea. ¿Cuál es su balance personal?

Reconozco que me voy con nostalgia. Ha sido una excelente escuela de aprendizaje democrático.

El Parlamento Europeo te ofrece la oportunidad de conocer otras culturas, otras maneras de hacer política, otras formas de dialogar. Llevo desde 1999 en la Eurocámara , la he visto crecer, transformarse y ahora que estoy a punto de cerrar esta etapa para irme al Congreso de los diputados, reconozco que me da mucha pena.

Por cierto, la hemos visto a usted representando una obra de teatro sobre los refugiados en el PE y también, hemos visto bailar a la eurocámara gracias a la música de Juanes y de su campaña contra las minas antipersonas, ¿nos hallamos, tal vez, ante nuevas formas de practicar la política? ¿Piensa repetir la experiencia?

El teatro, la música, la literatura… son lenguajes muy útiles para la política. Se trata de herramientas muy importantes para llegar al corazón de la gente y denunciar situaciones injustas.

Participar en la obra de teatro Refuge-es donde interpreté a una refugiada palestina, fue una experiencia muy especial.

La política consiste en ser capaz de recordar cada minuto que te debes a los y las demás, que estás a su servicio. Tú no eres protagonista, sino en todo caso, el vehículo de aquéllos y aquéllas a los que representa.