El Consejo Nacional de Mujeres de Cataluña (CNDC) ha organizado un acto en el marco de la 67 edición de la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer (CSW, por sus siglas en inglés). El acto Brecha digital y resistencias feministas en internet, ha sido realizado en formato híbrido, con participación en Nueva York y también online.
El tema de la 67 CSW ha sido el de la “Innovación y cambio tecnológico, educación en la era digital para conseguir la igualdad de género y el empoderamiento de todas las mujeres y niñas”.
Abrió el acto la consejera de Igualdad y Feminismos, Tània Verge, que manifestó la necesidad de volver a participar activamente y de manera presencial para seguir tejiendo alianzas en el marco de la CSW “explicando todo lo que aporta el movimiento feminista a Cataluña, al tiempo que se puede llevar también muchísimas cosas, después de todo lo que intercambie con las compañeras y de la incidencia política que ha hecho”.
Recuperar, pues, el acto presencial ha sido importante para las entidades feministas catalanas que este año han vuelto a trasladarse a la sede de Naciones Unidas en Nueva York, después de 3 años de actividad únicamente online, debido a la pandemia. “La novedad de este año es que desde Gobierno le acompañamos a la CSW acreditadas, por primera vez, como gobierno regional hecho que pone en valor la importancia que, desde el gobierno, tienen las políticas feministas y el trabajo que también queremos hacer a nivel internacional”.
La vicepresidenta segunda del Consejo, Eugenia Bretones, y en nombre de las más de 400 entidades que forman parte de este CNDC, resaltó la necesidad de reclamar este año, con motivo de la temática que se trata, que “queremos la inclusión de todas las mujeres y niñas en las TICS, no sólo como acceso a la educación, sino perspectiva de género en la programación, en la programación cultural, también, y una comunicación online feminista. Queremos que se visibilicen en las tics las mujeres y niñas sin estereotipos ni discursos ni sesgos de género” Y remarcó, también, la necesidad de que las tics tengan presente la interseccionalidad, para no olvidar a ninguna mujer.
El debate contó con la participación de cuatro ponentes y estuvo moderado por la periodista, Alícia Oliver . Se desarrolló en dos bloques de intervenciones: por un lado, conocer la situación de partida de cada uno de los ámbitos tratados; y el segundo bloque, conocer las resistencias y estrategias necesarias para revertir cada una de las situaciones que se presentaban.
En primer lugar intervino Karina Gibert , licenciada y doctora en Informática y presidenta de la Asociación de Mujeres COEinf que explicó que, aunque Cataluña es uno de los territorios más desarrollados del mundo, “tenemos problemas de acceso y de brecha digital, tanto de acceso a los dispositivos como de conocimientos.” Y dio algunas cifras, como por ejemplo, que «en 2021 teníamos casi la mitad de la población vulnerable sin acceso a internet, o que la falta de acceso a las conexiones ya los dispositivos no está distribuida equitativamente entre la población». Por eso, las personas mayores y, sobre todo, las mujeres mayores sufren muchísimo estas carencias, sin olvidar a las personas de rentas bajas, las cuales viven, también, la misma situación. Y a estos problemas hay que añadir, además, la falta de habilidades poniendo como ejemplo, que en Cataluña durante la pandemia muchas personas que necesitaban ayuda económica no pudieron solicitarlo porque desconocían las herramientas.
Sobre la inteligencia artificial explicó que nos rodea en nuestro día a día y, que sin duda, es un ámbito prometedor en Cataluña ya que el 13% del PIB catalán del pasado año, se origina en este sector, y se espera un crecimiento anual del 5%. “Nos encontramos con un sector de pleno empleo donde sólo hay un 8,6% de mujeres tecnólogas con posición tics y donde tenemos una carencia de profesionales enorme. Este último año ha habido 14.500 plazas vacantes en Catalunya, que no han podido cubrirse. Por tanto, es un espacio de oportunidades muy grande”.
Desde Cataluña participó Cristina Pulido , profesora e investigadora del Departamento de Periodismo y Ciencias de la Comunicación de la UAB y una de las coordinadoras del grupo de trabajo de Mujeres y Medios de Comunicación del Consell. Cristina hizo mención del Objetivo de Desarrollo Sostenible número 5, y en concreto, del punto que trata sobre la eliminación de todas las formas de violencias contra las mujeres y las niñas, así como del trabajo realizado desde el grupo, manifestando que hay muchas recomendaciones y aportaciones, pero «hay que evaluar el impacto social para no repetir errores e ir hacia adelante».
Hizo referencia, también, al estudio Free to be on line?, de 2020, donde ya se recogía que el 58% de las chicas jóvenes había experimentado acoso online y que no todo el mundo denuncia ni informa al respecto, por tanto, las datos reales son mucho mayores. «Una de cada cuatro jóvenes, tenían las mismas consecuencias psicológicas que si lo hubieran pasado físicamente, y uno de los resultados que más está preocupando es que este tipo de acoso online está silenciando las voces de las chicas».
Rosa Ma Rodríguez Quintanilla , una de las coordinadoras de la Red Internacional de Periodistas con Visión de Género, nos habló sobre la grave situación de violencias que vive la profesión periodística en México donde, evidentemente, esta violencia tiene un alto componente de género. “El espacio digital, las redes sociales, y la internet constituyen un medio especial para poder expresarnos, informarnos, comunicarnos, y también, hace falta decirlo, ha facilitado nuestra conexión y el fortalecimiento del movimiento feminista”. Pero en Méjico, como en otros países, las mujeres están muy expuestas en el espacio virtual.
Las plataformas digitales, continuó, se han convertido en facilitadoras de gran parte del acoso online contra las mujeres periodistas, y esta violencia, generalmente tiene un componente de género, muy claro, con amenazas de abusos, de violaciones, de exposición de imágenes, de invasión de la privacidad, de campañas de desprestigio, también ataques directos contra sus familias. Y recordaba que la violencia digital contra las periodistas es una prolongación de la violencia de género que se vive cotidianamente, de las desigualdades y discriminaciones estructurales que enfrentan a todos los países, y que también ha migrado a los espacios digitales. “Estas violencias las sufrimos, en general pero con mayor crudeza las periodistas, las defensoras de derechos humanos, las mujeres que participan en política, y no es casual, es el contexto social y patriarcal que nos sigue diciendo que el espacio público no es para las mujeres”.
Thais Ruiz de Alda, fundadora y directora de DigitalFems hizo énfasis en la falta de perspectiva de género en la información basada en datos, “a veces hay datos sin diferenciar el sexo o el género y, en otras ocasiones, aunque haya datos que sí cogen esta diferenciación, no tienen la perspectiva de género, y esto, nos genera una lectura no correcta de la realidad”. Añadiendo que cuando se habla del mundo tecnológico se necesita tener muchos datos para saber que está ocurriendo realmente. «En general hay una carencia muy grande de mujeres en el mundo tecnológico, y eso que ya se ha dicho antes, es muy importante».
DigitalFems junto con la Comisión de Mujeres Tic del sector tecnológico han trabajado en la recolección de datos del sector tic catalán, para lo que pusieron en marcha una encuesta dirigida al sector tecnológico. Con estos datos han hecho un informe que se presentará la próxima semana en Barcelona, el cual pretende dar una pincelada de lo que está pasando dentro de las empresas tecnológicas catalanas a efectos de liderazgo femenino en entornos tic, y de perfiles técnicos que se desarrollan en estas empresas . «Necesitamos saber cuántas mujeres están creando tecnología, y también, cómo estando llevando a cabo las empresas catalanas la captación de talento, según el sexo de las personas, y esta información la tendremos disponible a partir de la presentación del estudio».
En cuanto al bloque de las estrategias para mejorar la situación, Karina Gibert, manifestaba que es necesario actuar desde diferentes ámbitos: gobierno, sector educativo, sector empresarial, entidades profesionales, medios de comunicación, familias… Entre otros y, desde el gobierno, pedía que se incluyan en las bases de datos, de forma sistémica, toda aquella información que necesitan para poder estudiar los problemas de las mujeres, ya que no es suficiente, según decía , al poner el género de la persona dado que no existen otros indicadores relevantes para estudiar las problemáticas de las mujeres relacionada con la brecha salarial. “Estos datos deberían recogerse desde las instituciones, y nosotros realizar los análisis y el seguimiento”. En el ámbito educativo, hablaba de capacitar al profesorado en el ámbito de las tics para que puedan generar vocaciones en las niñas y niños, e “introducir el pensamiento computacional en los CV de los niños, desde muy pequeños, ya que por ser ciudadano digital debes aprender a tener pensamiento computacional”.
Respecto a los medios de comunicación, Cristina Pulido, apuntaba el papel fundamental que éstos tienen por la capacidad socializadora y la influencia en cómo aprendemos cómo es la sociedad, las relaciones, etc. y según el tratamiento informativo que realicen, promoverán el acoso o, todo lo contrario, creando espacios libres de violencia. Los medios de comunicación, continuaba “deben tener un papel clave en romper el silencio y no en promover ese silencio. O estás junto a las víctimas o estás junto a los acosadores, pero no se puede estar a ambos lados”.
Para Rosa Ma Rodríguez Quintanilla, cabe hacer hincapié en que las plataformas digitales proporcionen el acceso inmediato a los datos para las investigaciones judiciales sobre contenido ilegal que ponen en riesgo a las periodistas ya sus familias; puesto que el factor tiempo puede ser la diferencia entre la vida y la muerte. «El anonimato debe terminar cuando incurren en actos ilegales». Y añadía que “como periodistas lo que hacemos es resistir, acompañarnos, tejer redes de autoprotección, redes solidarias de acompañamiento. Tenemos claro que esto nunca será suficiente, pero quiero decirles que, con la experiencia que hemos tenido en México, las redes salvan vidas, y lo hemos visto en muchas ocasiones”.
Para reducir la brecha digital y hacer una internet más feminista, según Thais Ruiz de Alda “es necesario, sobre todo, romper los estereotipos de género en entornos digitales y tecnológicos. Y es necesario incrementar la participación de las personas que no son de género masculino, y cerrar esta rendija incentivando la creación de tecnología”. Insistía en que la tecnología es una herramienta que nos puede ayudar, “y si sólo hay un perfil de personas haciendo un tipo de tecnología quedarán muchas necesidades no cubiertas”. Por eso, debe ser más diversa, más funcional y más útil.
Cerró el acto, Meritxell Benedí , presidenta del CNDC y del Instituto Catalán de las Mujeres (ICD), que resaltó la necesidad de que el Consell siga promoviendo estos debates a nivel global ya que, con matices, la agenda compartida es prácticamente común. «La diagnosis la tenemos clara, en el ámbito digital y virtual ocurre lo mismo que en el ámbito analógico y real, pero multiplicado por la capacidad de impacto y de incidencia que tiene el ámbito digital». Y añadir que “las estrategias y resistencias que debemos adoptar las feministas pasan por la autoprotección, por que las redes nos acompañan, salvan vidas, y también por instar a una regulación. Yo creo que éste es el gran consenso que sale de este acto y que sale de estos días”.
Entidades del CNDC en la 67CSW
En este primer encuentro presencial, post pandemia, participaron en la sede de Naciones Unidas representantes de diferentes entidades del Consejo Nacional de Mujeres de Cataluña, como la Red Europea de Mujeres Periodistas, la Asociación de Derechos Sexuales y Reproductivos, el Instituto de las Desigualdades, la Asociación Helia, la Plataforma Unitaria contra las Violencias de Género, Mujeres COEinf, DigitalFems y el Centro de Estudios de las Mujeres de Europa.
Además del acto organizado por el grupo de trabajo de Participación Internacional del Consejo, y de la agenda propia de cada una de las entidades, las representantes de las asociaciones también pudieron encontrarse con la Delegación del Gobierno en Estados Unidos, que les ofreció una recepción con la comunidad catalana que vive en Nueva York.
Algunas imágenes de las representantes del CNDC