
Texto Victoria Hita
Tres detenciones en los dos últimos años. Por la primera, pedir públicamente la gratuidad de la enseñanza primaria, cumplió tres semanas y media de prisión; la segunda fue para manifestar en televisión el significado real del 8 de marzo, más allá del carácter festivo; y por la tercera, exigir el cumplimiento de los derechos de la infancia en su país, estuvo cuatro días en comisaría. La periodista congoleña, Sylvie Luzala, afirma que el peor sentimiento que le queda de todo esto es la «humillación».
El Grupo de Periodismo Solidario del Colegio de Periodistas de Catalunya se ha reunido esta semana en la sede de Barcelona con Luzala, especialista en periodismo de investigación sobre violencia, acoso sexual y prostitución en la República Democrática del Congo. Al encuentro han asistido una decena de periodistas, y miembros de la Associació Catalana per la Pau, entidad que acoge a la periodista hasta el mes de agosto.
Sylvie Luzala ha explicado que en su país «los medios no hablan de la mujer» y «lo que se ve y lo que se dice es muy difícil en un lugar donde la democracia sólo es formal». Aparte de las detenciones, esta profesional y su familia han recibido amenazas anónimas y llamadas que «crean tensiones y problemas psicológicos que se extienden más allá del núcleo familiar», puesto que implican un rechazo de la comunidad. Luzala ha denunciado que «los medios están al servicio de las empresas y crean noticias para ir contra grupos mediáticos», algo que, según las personas asistentes al debate, no es exclusivo de la República Democrática del Congo. Al igual que tampoco lo es la situación de la mujer: la lucha para que sea reconocida en la sociedad con los mismos derechos que un hombre. «Mi país es la capital mundial de la violencia contra la mujer en los ámbitos familiar, militar e institucional». Un ejemplo es en las listas electorales de los partidos políticos, donde no aparecen mujeres cuando son ellas las que impulsan proyectos y luchas por defender derechos humanos universales. El elemento diferenciador de injusticia con respecto a otros países es la convicción religiosa de la sociedad, que dificulta el reconocimiento de la mujer.
«Hijos del diablo»
Sylvie Luzala preside el Consejo de Administración de la asociación Étoile du Sud, defensora de los derechos de la mujer y los niños en el contexto de un país en guerra durante más de veinticinco años. En este sentido, considera que «la violencia sexual es un arma de guerra, ya que las mujeres víctimas de esa violencia cuando quedan embarazadas viven el rechazo, la condición religiosa impide que aborten y las criaturas se convierten en hijos del diablo», es es decir, en niños y niñas de la calle, y también son captados por grupos armados convirtiéndolos en niños soldados. La periodista denuncia que ni el Ministerio del Interior ni el de Defensa disponen de estadísticas de los niños soldados y se lamenta de la «complicidad internacional en la existencia de al menos 200 grupos armados en el país». Ha recordado que «en los veintisiete años de guerra cada uno de los tres presidentes ha formado su ejército y ahora nos encontramos con una proliferación de armas y de bandas de jóvenes financiadas por países de alrededor». Pese a reconocer que el país ha ido mejorando durante la transición que vive hacia la democracia, «el cambio no es de un día para otro: las primeras medidas a abordar son eliminar las cárceles ocultas y hacer visibles a las mujeres» .
Sylvie Luzala, periodista, activista y madre, señala que su estancia en Barcelona le está sirviendo para reflexionar en la distancia sobre los riesgos de la profesión, tomar más prevenciones a la vuelta y ser más consciente de los peligros de su trabajo.
Grupo de trabajo de Periodismo Solidario
Además de este desayuno con la periodista congoleña y el encuentro con tres periodistas mexicanos acogidos en la ciudad gracias al programa municipal «Barcelona acoge a periodistas de México», el grupo ha iniciado un ciclo de debates sobre «Conflictos olvidados», el primero de los que se realizó el pasado mes de marzo sobre la situación actual en Nicaragua. El segundo debate se realizará en junio sobre el aumento de la desinformación en Perú y las represiones a periodistas.
El próximo 17 de mayo, en la sala de Actos del Colegio de Periodistas se presentará la investigación y el documental realizado por dos periodistas mexicanos sobre «la huella del fentanilo en Cataluña», una investigación que trata sobre los cárteles del narcotráfico de México en alianza con la mafia china.
Sylvie Luzala, flanqueada por miembros del Grupo de Periodismo Solidario del Colegio de Periodistas y de la Asociación Catalana por la Paz